Cuando la Policía ingresó a su casa en el barrio 20 Viviendas, lo halló en el baño sin vida, en estado de descomposición y con signos de tortura.
La Justicia entonces comenzó a investigar y las sospechas recayeron sobre Carlos Javier Melgar, quien fue detenido poco después por la Policía de Corrientes en la terminal de ómnibus donde trabajaba. Mientras que el acusado de ser el autor material del homicidio, el obereño Enzo Iván Rodríguez, se dio a la fuga, pero fue atrapado en Misiones, dos meses después del crimen, ya que logró huir hacia su lugar de origen, en la ciudad de Oberá.
El registro de cámaras de seguridad en las inmediaciones confirmó que ese día, 13 de abril, Rodríguez abandonó la casa con la moto de Espíndola, mientras que Melgar se retiró con su vehículo en cuyo interior se sospecha que llevaba un televisor y otros elementos de valor de la víctima.
Precisamente, el móvil del homicidio habría sido el robo, porque también faltó dinero.